Cabrera, dulce vecina
Parque nacional maritimo-terrestre más grande de europa
Siento, al observarte, inmóvil, que el mundo podría encogerse igual que un pañuelo, arrugarse igual que un papel, perderse igual que un soplo de aire, y tú seguirías ahí, inmóvil, bella, escultural, como princesa que aguarda a su príncipe azul, y se, sin duda alguna, que tu príncipe son las cosas bonitas que día a día te dicen al verte, al cuidarte, al mimarte. eres nuestro tesoro, el de todos.
Siento también como se paraliza el tiempo cuando clavo mi mirada en tu horizonte, pequeño y delicado trozo de mi suelo, arrancado y arrastrado por el paso de los años, siglos, milenios, muero por volver a estar ahí, contigo.
Siento al mismo tiempo que nada sería lo mismo si al mirar hacia ese lugar no te levantaras tú, rígida, delicada, hermosa, el paisaje ya no existe si no estás tú en él.
Puede el amor materializarse en algo físico? sí, puede.
Escribo hoy, ahora y aquí para que Julio, ya que no hay más días ni oportunidades, sea el mes, por ahora, con más entradas...
¿Y quién no ha tenido un amor de colegio? son los más puros y sinceros, inocencia, preciosa inocencia!!
Vivo en el País del sol, en la comunidad del calor, en la ciudad del lujo en su justa medida ... Soy del paraíso, soy Palmesana, soy Mallorquina, soy Balear ... Tengo la piel salada, mar en mis venas, brisa marina en mis pulmones ... Orgullo isleño.
Hay veces que una imagen vale más que mil palabras, hoy es una de ellas. Ibiza, la isla blanca, la isla marchosa, la pitiüsa más preciada... es hoy un poco menos blanca.
Y me lamento de todo lo que pude sentir, y me lamento de los días que a tu lado viví. Me lamento de todo lo que te pude decir, y de todo lo que hice, o pude percibir. Me lamento de todo lo que no llegaste a hacer, de las frases olvidadas, de las mentiras guardadas, de la traición oculta, de las verdades dañadas. Me lamento de las lágrimas que por ti pude vertir, me lamento del tiempo que encerrada en mi misma no pude combatir. Me lamento de la cinta que en los ojos sentí, aprisionada y ahogada, pero que tonta fui. En definitiva, me lamento de ti.
... y por que no encuentro más...
